La disciplina y la responsabilidad son hábitos muy importantes que tus hijos deben aprender desde pequeños. Las tareas escolares cumplen esa función y a medida que van creciendo debemos ir reforzando la idea de “cumplir todos sus deberes escolares por sí solos”.
Como padres, debemos estar atentos de su rutina a la hora de realizar la tarea escolar, hay ciertas distracciones que debemos evitar e incluir algunas prácticas para mejorar su rendimiento.
¡Pon en práctica estos 10 consejos!
1. Establecer un espacio apropiado.
Si no cuentas con un salón de estudio, acondiciona una habitación o escritorio bien iluminado con acceso a libros y todo material que sea de estudio. Recuerda no incluir distracciones como juguetes, televisión o laptops, pueden perturbar su concentración.
2. Fijar un horario.
Lo más recomendable es optar por un horario intermedio, que no sea inmediatamente llegando de la escuela ni en horario nocturno. Una vez elegido, se debe cumplir la hora para generar un hábito.
3. Cumplir reglas y horarios.
Una vez establecido los dos puntos anteriores, se debe ser firme en su cumplimiento. Tu hijo debe aprender que solo en casos extremos, solo habrá excepciones.
4. Acompañarlos durante la tarea.
Esto no significa que debas hacerle la tarea, solo muestra tu interés si en caso necesita alguna ayuda. Mientras tu hijo resuelva solo sus tareas se volverá más independiente y reforzará su autonomía e inteligencia.
5. Dar el ejemplo.
Muéstrale a tu hijo que también cumples con tus deberes: revisar y calcular las facturas del hogar, terminar los quehaceres, leer un libro, etc. Al verte, tu hijo se sentirá motivado, recuerda los pequeños siempre intentan parecerse a sus mayores.
6. Estar atentos si necesita ayuda.
Si tu hijo se atasca con alguna tarea, guíalo o dale pistas para que él mismo encuentre la solución correcta. Si vez que está muy estresado, deja que tome un respiro o pequeño recreo bajo tu supervisión.
7. Dale herramientas para pensar.
Solo es casos de dificultad en sus tareas, bríndale instrumentos que le apoyen en su tarea, es decir, libros para hallar la solución, usar la laptop si en caso es necesario o emplear la calculadora para verificar sus resultados.
8. Revisar las tareas culminadas.
Demuestra interés por las actividades escolares de tu hijo, revisa todos sus cuadernos y trabajos cada vez que termine sus tareas, así verificarás si lo está haciendo bien. Felicítalo en cada proyecto escolar, así tu pequeño lo tomará como un reconocimiento de su esfuerzo y lo animará para seguir adelante.
9. Evitar recompensas.
No acostumbres a dar premios a cambio de cumplir tareas, confundirás la dinámica y tu hijo lo tomará como una oferta. Es muy diferente motivarlo con palabras u otras actividades relacionadas con el estudio.
10. Habla positivo de las tareas escolares.
Cada vez que menciones la escuela, hazlo con palabras motivadoras y expresiones positivas. Si te refieres a las tareas como si fuera un castigo o algo aburrido, tus hijos lo notarán. Destaca que todo lo aprendido le servirá en el futuro y logrará con éxito la profesión que sueña ser de grande.