¿La frase “entrenamiento para dormir” te suena conocida? Es un término que se usa ahora entre los pediatras de Estados Unidos para referirse a cómo regular el sueño de tu bebé. En este artículo te presentamos los consejos de la pediatra Nicole Johnson.
En principio, toda familia realiza un entrenamiento de este tipo así sea a su manera: todo lo que los padres hacen para que su bebé se duerma y se mantenga dormido sin despertarse constantemente.
Usualmente los bebés no están listos para este tipo de entrenamiento hasta que tienen 4 meses. Después de este punto, hay variedad de técnicas para que descanse plácidamente, al igual que tú. A continuación te presentamos las 4 técnicas para que tu bebé aprenda a dormir sin ayuda, las que son infalibles si se aplican correctamente: Publicidad
1. La desaparición gradual.
- La idea es ir alejándote de tu bebé gradualmente hasta que se duerma por su cuenta. Si es que siempre has acariciado a tu hijo hasta que se quede dormido, reduce esto poco a poco y ponlo en la cuna adormitado, pero despierto, y que se quede dormido por su cuenta.
- Si es que se agita un poco, regresa a él y trata de tranquilizarlo hasta que se quede dormido. Con el paso de algunos días tu bebé se acostumbrará a este nuevo sistema (el ritmo es tuyo) deberías hacer cada vez menos trabajo y tu hijo más.
2. El método de la silla
- Esta técnica acarrea un poco de lloriqueo, pero te permite estar en la habitación de tu hijo todo el tiempo. Empieza haciendo la rutina para dormir de siempre; luego, pon una silla cerca de la cuna y siéntate ahí mientras que él o ella se quedan dormidos. No debes prestarle demasiada atención.
- La razón por la que estás en la silla es para asegurarle que estás ahí para él. Todas las noches debes alejar un poco más la silla de la cuna, hasta que tu hijo finalmente es capaz de quedarse dormido sin que estés en la habitación.
- Este método puede ser difícil y toma varios días, sobre todo porque a las mamis se les hace complicado ignorar a tu bebé. Sin embargo, con tiempo y persistencia, esta puede ser una buena opción para los padres que no quieren dejar a su hijo llorando solo, pero que no han tenido éxito con otros métodos.
3. Vigilar y consolar
- Este método permite que tu bebé llore mientras lo vigilas por intervalos. La meta aquí es asegurarle a ambos- a ti y al bebé- que está bien, y consolarlo.
- En concreto: Cuando sea hora de dormir déjalo solo para que lo logre por su cuenta, si no lo logra y llora, regresa cada 5 minutos y consuélalo por 2 o 3 minutos. Luego de ello déjalo solo de nuevo.
- Si se despierta en la noche llorando procede de la misma manera. Esta técnica es excelente porque permite al bebé aprender por su cuenta a dormirse de nuevo cuando se despierta sin ayuda.
4. Dejarlo por su cuenta
- Esta técnica es similar a la anterior de vigilar y consolar, solamente que sin el vigilar y consolar, pues dejas a tu hijo completamente solo para que se quede dormido. No te alarmes: tarde o temprano tendrás que hacerlo.
- Lo que debes hacer es dejar a tu bebé llorar a tu bebé el tiempo que sea necesario. Tu tranquila, no pasará nada, no sufras.
- Nunca cometas el error de ir “al rescate” pasados 10, 20 o 30 minutos porque la siguiente vez volverá a llorar el tiempo que sea hasta que vayas, no lo hagas.
- Por eso es obligatorio ser 100% consistente ya que este método logra resultados en solo 3 o 4 noches. Eso sí, nadie te obliga a escoger este método, si prefiere algo gradual y en el que tú puedas consolarlo a gusto están los otros tres métodos.
Eso sí, la doctora Nicole Johnson advierte que no existe una “manera correcta” sino la que tu escojas, siempre que funcione para ti y tu bebé, tomando en cuenta las personalidades de ambos. Al final lo que importa es que tu bebé aprenda con cariño y saludablemente, hábitos de sueño que los dejen descansar a ambos.