¿Te ha pasado que después de un día difícil o un momento de tristeza, escuchas una canción y automáticamente tu estado de ánimo se recompone? Pues de eso se trata la musicoterapia, una herramienta alternativa que utiliza instrumentos vibratorios para activar campos energéticos del cuerpo y tratar algunos problemas de salud mental.
Controla tu angustia y depresión con la musicoterapia
Las terapias alternativas a través de la música son una experiencia sensorial que activa diferentes áreas cerebrales de manera simultánea. Esto se convierte en un tratamiento muy útil a nivel emocional, cognitivo y físico ya que se puede enfocar la concentración en esa área específica que te está afectando.
De hecho, muchas investigaciones han demostrado grandiosos resultados incluso en sesiones de rehabilitación, aprendizaje y para fortalecer el bienestar.
Beneficios para tu espíritu
La música es un medio de expresión, en ocasiones ni siquiera requieres de escuchar una letra que te conmueva o emocione, basta con oír con un piano, un violín o un saxofón que termine conquistando todos tus sentidos.
Algunos artistas usan sonidos para estimular su creatividad, pensamiento, lenguaje, memoria y aprendizaje y puedes sentirla incluso desde cuando estás en el vientre de tu madre. Aporta fabulosas bondades:
- Mejora tu orientación, aumenta tu capacidad de atención y concentración.
- Estimula tu lenguaje, brindándote herramientas comunicativas efectivas.
- Relaja los músculos que tienes tensionados, por ejemplo, en crisis de pánico, la música tranquiliza.
- Disminuye los niveles de ansiedad.
- Mejora tus habilidades sociales.
- Incrementa tu autoestima.
- Es una especie de medicina holística, es decir que tú te sanas naturalmente a través de tu organismo.
Elige tu playlist correctamente
Hay una gran infinidad de géneros musicales, pero no todos funcionan en este tipo de terapia alternativa y complementaria por eso debes saber elegir ciertos ritmos en los que el estrés, la depresión o la angustia comienzan a apoderarse de ti.
Ponte tus audífonos inalámbricos, recuéstate en un lugar cómodo y dale play a una lista de reproducción con estas características y conviértete en tu propio terapeuta musical:
- Tiempo
- Los tiempos lentos transmiten calma y seguridad este funciona en momentos de ansiedad que ya no puedas controlar.
- Los rápidos suelen ser más excitantes, si estás a punto de presentar una prueba importante, motívate con estos sonidos.
- Ritmo
- Si quieres una actividad motora lenta y si necesitas calmarte elige un ritmo lento.
- Armonía
- Se produce cuando suenan varios sonidos a la vez. Si estás pasando por una situación muy triste selecciona armonías que levanten tu ánimo. Los solos de guitarra son fabulosos.
- Intensidad
- Utiliza un volumen medio adecuado para tu capacidad auditiva
- Instrumentalización
- Los sonidos de la naturaleza son placenteros. El piano, la cuerda, el violín son melancólicos, pero a la vez expresivos y penetrantes.
Mejora tu calidad de vida, baila, canta y sé feliz
Existen casos en los que la música ha ayudado en distintas etapas médicas y terapéuticas, por ejemplo: la recuperación del habla después de un daño cerebral, en niños con autismo, personas con alzhéimer y esquizofrenia y en otros trastornos emocionales como la depresión, ansiedad, conductas alimentarias dañinas y cambios de personalidad.
Esta es una alternativa a la mejora muy efectiva, la musicoterapia la puedes practicar en cualquier momento del día e incluso, accedes a ella desde tu teléfono inteligente.
¿Cómo se lleva a cabo una sesión de musicoterapia?
- Puedes hacerlo solo si quieres, esto depende de tus necesidades, pero también está permitido pedir compañía y acudir a esa persona que esté contigo pacientemente.
- Comienza a pensar qué es lo que te sucede, qué pasa dentro de ti, si tienes miedo, ganas de llorar, ira, dolor; exprésalo. Una vez seas consiente de lo que te acontece ya es momento de comenzar a sanar.
- Comienza a declarar y a agradecer la sanación, los cambios que se van a presentar a nivel físico y emocional y todo lo que digas para tus adentros deben ser siempre en positivo.
- Ponte tus audífonos y comienza a escuchar tu música relajante, siente recorrer los sonidos por tu cuerpo y cómo va curando cada parte de tu sistema nervioso, muscular, tus órganos sexuales y corazón.
- Respira lentamente, inhalando por tu nariz e inflando tu estómago y exhalando votando todo el aire por la boca.
- Usa un humidificador con esencias relajantes para que te concentres más fácilmente.
- El tiempo que le dediques depende de ti.
- Deja que todas las emociones fluyan y vívelas, no las retengas.
- Este último paso es opcional, pero una vez termines, puedes escribir lo que acabar de experimentar, esto con el fin de que vayas releyendo lo que has manifestado y así notes tu progreso.
Música y terapia dos medicinas para cuerpo y alma
Adapta la musicoterapia a tu cotidianidad, incluso en aquellos días de estrés por tu trabajo o porque tuviste una discusión con tu crush o perdiste un examen de la prepa en cualquier situación puede ayudarte de manera muy positiva.
Los sonidos que se emiten a través de diversos instrumentos nutren tu mente y cuerpo, así que comienza a escuchar las playlists más poderosas que te hagan sentir una mejor persona.