- Comer mucha fibra soluble
La fibra soluble ayuda a absorber agua, y además forma un gel que hace que el organismo procese más lento los alimentos a través del sistema digestivo.
Los estudios indican que este tipo de fibra favorece la pérdida de peso, ayudando al cuerpo a sentirse lleno, por lo que naturalmente, ayuda a comer menos. También, puede disminuir la cantidad de calorías que el cuerpo absorbe de los alimentos. Asimismo, la fibra soluble ayuda a combatir la grasa del vientre, por medio de algunos componentes que actúan de manera inmediata entrando al organismo.
Los mejores alimentos ricos en fibra soluble son las semillas de lino, las coles de Bruselas, los aguacates y las legumbres.
- No consumir alcohol en exceso
El exceso de alcohol en el organismo contribuye a la formación excesiva de grasa del vientre. Por ello, es importante reducir el consumo de alcohol, lo cual puede ayudar a reducir la grasa en el abdomen.
- Comer una dieta alta en proteínas
La proteína es un nutriente importante para reducir el peso, ya que el consumo de proteína aumenta la liberación de la hormona de la saciedad PYY, la cual disminuye el apetito. La proteína, también aumenta el ritmo metabólico y ayuda a mantener la masa muscular durante la pérdida de peso.
Las mejores fuentes de proteínas para incluir en la alimentación son la carne de res, leche, huevos, pescados y frutos secos.
- Evitar los alimentos que contienen grasas trans.
Las grasas trans contribuyen a la formación de grasa en el abdomen, mediante el bombeo de hidrógeno en grasas no saturadas. Este tipo de grasas se encuentran en los alimentos envasados, salsas y margarinas.
Estas grasas también contribuyen a la aparición de enfermedades cardiacas, el aumento de grasa abdominal, la inflamación y la resistencia a la insulina. Debido a esto, es importante leer las etiquetas de los alimentos envasados y evitar el consumo de alimentos con grasas trans, que a menudo aparecen como grasas “parcialmente hidrogenadas”.
- Reducir los niveles de estrés.
El estrés puede hacer que aumente la grasa del vientre, mediante la activación de las glándulas suprarrenales, las cuales producen el cortisol, también conocida como la hormona del estrés.
Diversas investigaciones han demostrado que los altos niveles de cortisol, aumentan el apetito y la unidad de almacenamiento de grasa abdominal. También, es importante saber que el aumento de cortisol provoca la acumulación de grasa en el abdomen.Por ello, es importante encontrar estrategias para controlar el estrés, entre las más eficaces se encuentra la práctica de meditación o de yoga.