Según la OMS, es el cansancio de las personas ante el coronavirus, el cual hace que nos sintamos desmotivados y aburridos. Sepa cómo enfrentarla.
Después de casi un año en alerta ante la aparición del coronavirus y la posibilidad de un eventual contagio, muchas personas se encuentran cansadas, aburridas y desmotivadas por tener que seguir cumpliendo las medidas de protección. Esto tiene nombre y ha sido denominado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como “fatiga pandémica”.
Según la OMS, la fatiga pandémica ha ido emergiendo gradualmente a medida que ha ido aumentando el tiempo en que las personas deben mantener la hipervigilancia y ciertos hábitos en su vida diaria, como usar mascarillas, lavarse las manos constantemente, guardar la distancia social y pasar largas temporadas en casa.
Esta situación puede hacer que nos sintamos desmotivados, con una sensación de incertidumbre constante que puede llevarnos a relajar las medidas de autocuidado.
Se estima que el 60% de la población europea está padeciendo fatiga pandémica, la cual se acentúa en los países con periodos más largos de confinamiento.
Carlos Bromley, psiquiatra del Colegio Médico del Perú, señaló que la fatiga pandémica es una respuesta normal del organismo ante la crisis de salud prolongada que estamos viviendo, pues las personas tienen miedo de contagiarse y morir, mantienen una elevada sobrecarga laboral o no tienen trabajo y les preocupa el futuro. “En nuestro país esta situación está ocasionando el incremento de los problemas de salud mental, como ansiedad, depresión y consumo de alcohol”, dijo.
Los síntomas
Explicó que la fatiga pandémica se manifiesta con cuadros de insomnio, irritabilidad, cambios de humor, aburrimiento, problemas de concentración, impulsividad, pérdida del autocontrol, violencia, poca tolerancia a la frustración, sentimientos de angustia y poco respeto a los demás.
Para enfrentar la situación, el experto dio una serie de recomendaciones a fin de vivir una vida más tranquila:
1. Reconozca y normalice lo que siente
Es importante saber que es normal sentirse tristes o estresados. No deben usar la negación ni minimizar sus sentimientos, pues eso los puede llevar al bloqueo y a usar mecanismos de defensa que a la larga afectarán la salud mental.
2. Identifique ideas concretas
Lo que pensamos influye en nuestras emociones y comportamientos, por eso es importante apuntar a pensamientos positivos, para así generar emociones y conductas positivas.
3. Cuestione los pensamientos negativos
A veces se suele pensar de manera apresurada y equivocada, pero es mejor detenerse a analizar la situación. Hay que contrastar nuestros pensamientos y buscar las opiniones de otras personas. No hay que ser fatalistas y ver el vaso medio lleno en lugar de medio vacío.
4. Identifique sobre qué tiene control
Para mejorar la situación de control es importante tener una rutina diaria que sea lo más parecida a la que llevaba antes de la pandemia. Hay que planificar las actividades y no ser como un barco a la deriva. Recuerde que no debemos intentar controlar lo que no podemos.
5. Tómese pausas activas
Es importante hacer pausas en el trabajo y en los estudios. No se puede estar conectado todo el tiempo sin descansar. Hay que darnos un respiro de algunos minutos cada hora para comer algo, conversar con un familiar o hacer estiramientos. Eso nos ayudará a distraernos de la carga laboral o de las actividades diarias.
6. Relájese y combata el estrés
Por ejemplo, con estiramientos, respiraciones profundas, meditación, relajación, etc. Hay muchas aplicaciones y videos de Internet que muestran cómo hacerlo y no es necesario estar acostado en un ambiente cerrado o sin bulla. Puede relajarse mientras trabaja o va en un bus.
7. Busque en quien confiar
Cuente con un familiar, amigo o compañero de trabajo para hablar de las cosas que le causan temor y hacer catarsis. Dedique unos minutos al día a su familia que se encuentra lejos, así la sentirá más cerca. Las emociones negativas deben ser expresadas para poder eliminarlas.
8. Aprenda a decir que no
Esto debe ser una filosofía de vida. No debemos aceptar las responsabilidades que no podemos cumplir. Si hay alguna tarea que usted siente que lo rebasa, tome un tiempo corto para reequilibrarse y decir que no. Eso lo ayudará a lidiar con el estrés y lo fortalecerá.
9. No haga planes a largo plazo
Si lo hace, se puede frustrar, sobre todo teniendo en cuenta la pandemia. Lo aconsejable es vivir el aquí, el ahora y el futuro cercano. Construya su futuro a partir del presente satisfactorio. Para eso, haga lo que le gusta cada día y elimine los pensamientos negativos.