¿Constantemente te sientes cansado y parece que cuando descansas no logras recuperar fuerzas? Hoy te contamos sobre el síndrome de fatiga crónica, una condición que podrías estar sufriendo.
El síndrome de fatiga crónica es una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo. No es una enfermedad, sino un conjunto de síntomas que pueden ser causados por diversas condiciones.
Algunos de los síntomas más comunes pueden ser fatiga, disfunción cognitiva y dolor.
La diferencia entre un cansancio normal y el surmenage, radica en que este último empeora con la actividad física o mental, pero no mejora con el descanso. Hoy te contamos de qué forma se presenta este síndrome y cómo podemos manejarlo si presentamos los síntomas.
Síntomas principales
Recuerda que los síntomas pueden variar de una persona a otra, y la gravedad de estos pueden fluctuar de un día para otro. Estos son algunos de los signos a considerar:
- Fatiga
- Problemas de memoria o concentración
- Dolor de garganta
- Dolores de cabeza
- Agrandamiento de los ganglios linfáticos del cuello o las axilas
- Dolor muscular o articular sin explicación
- Mareos que empeoran al pasar de estar acostado o sentado a estar de pie
- Sueño no reparador
- Agotamiento extremo después de realizar ejercicio físico o mental
Posibles causas
Se desconoce la causa real del síndrome de fatiga crónica, sin embargo, los posibles desencadenantes según expertos, serían:
- Infecciones virales: Entre los virus sospechosos se encuentran el virus de Epstein-Barr y el virus del herpes humano 6. Todavía no se ha encontrado una relación concluyente.
- Problemas del sistema inmunitario: Los sistemas inmunitarios de las personas que sufren de surmenage, parecen estar levemente afectados, pero no es definitivo saber si este deterioro es suficiente como para causar este trastorno.
- Desequilibrios hormonales: Las personas que tienen síndrome de fatiga crónica pueden experimentar niveles anormales de hormonas en la sangre producidas por el hipotálamo.
- Trauma físico o emocional: Algunas personas han indicado que experimentaron una lesión, una cirugía o estrés emocional significativo poco antes de que comenzaran los síntomas.
¿Cómo diferenciar entre un cansancio rutinario y el síndrome de fatiga crónica?
No hay una única manera de confirmar un diagnóstico de síndrome de fatiga crónica, ya que los síntomas pueden imitar los de muchas otras enfermedades. Sin embargo los criterios para un diagnóstico propuestos por el Instituto de Medicina de los Estados Unidos son:
- Tan grave que interfiere con la capacidad para participar en las actividades que se hacían antes de la enfermedad.
- No se alivia sustancialmente con el reposo.
- Empeora con esfuerzo físico, mental o emocional.
- Dificultades con la memoria, el enfoque y la concentración
- Mareos que empeoran al pasar de estar acostado o sentado a estar de pie
Tratamiento
No existe un tratamiento específico para este síndrome, pero algunas personas han mejorado con algunas técnicas de terapia y, en algunos casos donde los síntomas son más intensos y persistentes, con medicina prescrita por médicos especialistas.
Terapia
- Asesoramiento: Hablar con un consejero puede contribuir en el desarrollo de capacidades para afrontar enfermedades crónicas, abordar limitaciones en la rutina diaria y mejorar la dinámica con el entorno familiar.
- Abordar los problemas del sueño: La falta de sueño puede dificultar el tratamiento de los síntomas del síndrome. Es posible que te sugieran evitar la cafeína o cambies tu rutina a la hora de acostarte.
- Hacer ejercicio: Las rutinas de ejercicio que comienzan con una intensidad muy baja y aumentan progresivamente, pueden ser útiles para mejorar la función a largo plazo.
Por último, te recomendamos acudir a un médico si presentas varios de los síntomas mencionados anteriormente y si suelen ser muy constantes en tu día a día. Está bien informarse individualmente, pero es mejor que un experto pueda ayudarte a tratar esta u otras condiciones adecuadamente.