Las vitaminas son sustancias indispensables en la nutrición. El organismo necesita a las vitaminas para asimilar otros nutrientes, regular el sistema nervioso y ayudar a la formación del material genético de las proteínas, los glóbulos rojos y las hormonas.
Como el cuerpo no puede producir ciertas vitaminas, y otras las produce en cantidad insuficiente, tiene que obtenerlas de los alimentos. La leche materna, el único y más importante de todos los alimentos durante los primeros meses de vida, contiene todas las vitaminas, además de minerales, proteínas, hierro y demás nutrientes que un bebé necesita para crecer sano. Pero cuando comienza el proceso de ablactación (introducción de alimentos sólidos en la dieta del bebé) y la cantidad de leche materna que consume empieza a disminuir, es fundamental que siga recibiendo una adecuada cantidad de vitaminas en su dieta.
En realidad no existe un alimento mágico que las contenga todas, por lo que es importante que combinemos bien los grupos de alimentos para cubrir nuestras necesidades nutrimentales, ya que en caso de no ser así pueden presentarse trastornos orgánicos en relación con las vitaminas como:
- Avitaminosis: si hay carencias totales de una o varias vitaminas
- Hipovitaminosis: si hay carencia parcial de vitaminas
- Hipervitaminosis: si existe un exceso por acumulación de una o varias vitaminas, sobre todo las que son poco solubles en agua y, por tanto, difíciles de eliminar por la orina.
Vitaminas especiales por etapas
- Embarazo: Aumentan las necesidades de vitaminas B1, B2, B6 y ácido fólico
- Lactancia: Se requiere un aporte suficiente de vitamina A, B6, D, C y ácido fólico
- Bebés y lactantes: La mamá no debe sufrir ninguna carencia vitamínica. Dale a tu bebé baños de sol para estimular la producción de vitamina D
- Niños: Es importante que no falten las vitaminas A, C, D, B1, B2 y ácido fólico
- Dietas para adelgazar: Controla el aporte de vitamina B2 y ácido fólico
- Para fumadores: Como la vitamina C interviene en los procesos de desintoxicación del cuerpo y reacciona con los tóxicos del tabaco, se necesita un aporte superior al recomendado
- En situaciones de estrés: Bajo tensión emocional las glándulas suprarrenales segregan una mayor cantidad de adrenalina, que consuma una gran cantidad de vitamina C. También se necesitan mayores cantidades de vitamina y las del grupo B
- Medicamentos: Los antibióticos y los laxantes destruyen la flora intestinal, por lo que se puede sufrir una baja de vitaminas K, H o B12.